La vitamina C o ácido ascórbico es uno de los nutrientes más importantes de los que debemos incluir en nuestra dieta. Es una vitamina liposoluble utilizada por el cuerpo para reparar y mantener los tejidos celulares.
Entre sus principales beneficios encontramos su efecto antioxidante, es fundamental para la formación de colágeno y favorece la correcta cicatrización de las heridas. Fortalece el funcionamiento del sistema inmunológico y ayuda al organismo a aprovechar el hierro procedente de los alimentos.
Además, si consumimos regularmente la cantidad necesaria de esta vitamina, lograremos retrasar el envejecimiento de la piel, ya que tiene un impacto saludable sobre la formación de puentes de colágeno y combate los radicales libres.
Alimentos que contienen Vitamina C
Esta vitamina está presente en casi todas las verduras:
- Lechuga, tomate, pimentón, brócoli, coliflor, entre otros.
Y en las frutas frescas como:
- Fresas, naranja, limón, lechosa, guayaba.
Finalmente, tener una dieta balanceada es más que suficiente para cumplir con las necesidades diarias de esta vitamina, sin necesidad de recurrir a alimentos caros o exóticos.