Los períodos menstruales dolorosos son en los cuales una mujer experimenta dolor o molestia en la parte baja del abdomen tipo cólico y algunas veces también se presentan dolores en la parte baja de la espalda.
El dolor leve es normal durante la menstruación pero el dolor excesivo no lo és. Este dolor excesivo se denomina dismenorrea.
Algunas veces el dolor dificulta el desempeño de las actividades académicas, hogareñas y laborales normales por algunos días durante cada ciclo menstrual.
La dismenorrea se clasifica en dos grupos; la primaria, se refiere al dolor menstrual que se presenta más o menos hacia el momento cuando apenas comienzan los períodos menstruales en las mujeres. Este tipo de dolor no está relacionado a problemas con el útero u otros órganos pélvicos. Las prostaglandinas que son las hormonas precursoras de la inflamación se activan durante este proceso y el dolor generalmente se debe a ella.
Por su parte la dismenorrea secundaria, es el dolor menstrual que se desarrolla posteriormente, en mujeres que han tenido períodos normales y con frecuencia está relacionado con problemas en el útero, ovarios, entre otros.
Podemos vincular este dolor a enfermedades como endometriosis, miomas, ovarios poliquísticos, síndrome premenstrual, infecciones o enfermedades de transmisión sexual, éstres, ansiedad, enfermedades pélvicas, entre otras.
Es necesario que empleemos algunos cuidados o tomemos algunas medidas en el hogar para evitar el uso de medicamentos como primera opción:
- Aplicar almohadillas térmicas en la parte baja del abdomen.
- Hacer masajes circulares suaves con las puntas de los dedos alrededor del abdomen bajo.
- Beber líquidos calientes como infusiones o té de manzanilla.
- Comer poco pero con frecuencia.
- Consumir una alimentación rica en carbohidratos complejos, como granos integrales, frutas y verduras, pero baja en sal, azúcar, alcohol y cafeína. Con esto evitaremos la retención de líquidos y lograremos sentirnos más livianas.
- Mantener las piernas elevadas mientras está acostada o acostarse de lado con las piernas dobladas.
- Practicar técnicas de relajación como meditación o yoga.
- Ensayar con medicamentos antiinflamatorios como ibuprofeno. Empiece a tomarlo el día antes cuando se espera que comience el período y continúe tomándolo regularmente durante los primeros días de dicho período.
- Tomar suplementos de vitamina B6, calcio y magnesio, especialmente si el dolor es a causa del Síndrome pre-menstrual.
- Tomar duchas o baños calientes.
- Caminar o hacer ejercicios con regularidad. Bajar de peso si tiene sobrepeso.
Si estas medidas no funcionan, es recomendable que visites a tu ginecólogo para que el determine la causa de la dismenorrea y te indique fármacos que te ayuden con el dolor. Dichos fármacos pueden incluir; antibióticos, anticonceptivos orales, antiinflamatorios, analgésicos, entre otros.
Debemos estar alerta si se presenta algún otro síntoma que acompaña al dolor, si el flujo vaginal aumenta y tiene mal olor, fiebre, retrasos en el período menstrual, si no alivian los síntomas después de 3 meses tomando el tratamiento, si tiene molestias por el dispositivo intrauterino que le colocaron recientemente, si elimina coágulos de sangre, si se presenta algún tipo de dolor cuando no tiene el período menstrual o si continúa luego del mismo.
Es imprescindible estar al pendiente de todos los síntomas que puedan presentarse y consultar directamente con tu ginecólogo para que él determine el problema que está causando este dolor y así poder encontrar la mejor solución para tu salud. ¡No te descuides!